Castilla y León en la Prehistoria

Los primeros habitantes se instalaron en la sierra de Atapuerca (Burgos) y cerca de los ríos Arlanzón, Pisuerga, Tormes... hace aproximadamente un millón de años. Eran nómadas y se dedicaban a la recolección de frutos silvestres y la caza.

En algunos lugares se han encontrado restos de huesos, armas y herramientas de trabajo, eran los cazaderos o zonas en las que se descuartizaban los animales cazados. Algunos cazaderos importantes son Galisancho y La Maya, en Salamanca, Mucientes, en Valladolid, Villafría en Burgos o Perilla en Zamora.

Se han hallado también algunos grabados con figuras que representan animales como en el yacimiento de Siega Verde, en Salamanca y Domingo García, en Segovia.

A finales del Neolítico se construyeron numerosos monumentos megalíticos, por lo que se han hallado numerosos dólmenes, especialmente en las provincias de Zamora y Salamanca. probablemente, estos monumentos se utilizaban para enterrar a los muertos acompañados de numerosos adornos y utensilios. Unos de estos dólmenes más original se encuentra el La Velilla, Salamanca.

Algunos de los yacimientos más importantes de Castilla y León correspondientes a la Edad de los Metales son los de Villabuena del Puente, en Zamora y Fuente Olmedo, en Valladolid, donde se han encontrado utensilios de cobre y piezas de cerámica con forma de campana invertida (vasos campaniformes). También se conservan los restos de un antiguo poblado de la Edad de los Metales en el yacimiento arqueológico de Cogotas, en Ávila, donde se han encontrado numerosos objetos de bronce y recipientes de cerámica decorados con puntos y rayas.

 ATAPUERCA.

Es un conjunto de yacimientos arqueológicos situado en la provincia de Burgos. Tienen fama mundial ya que allí se han encontrado los restos humanos más antiguos de Europa, así como numerosas herramientas de piedra y huesos de animales como bisontes, zorros, rinocerontes...

El grupo de investigadores que trabaja en Atapuerca recibió, en 1997, el Premio Príncipe de Asturias de Investigación y en el año 2000, los yacimientos fueron declarados Patrimonio de la Humanidad. Recientemente, en 2007, la Junta de Castilla y León los ha designado como Espacio Cultural.