Lluvia ácida y residuos radiactivos

Cuando se queman derivados del petróleo o carbón se emiten a la atmósfera, junto al humo, sustancias que se disuelven en al agua de lluvia y provocan la lluvia ácida, que resulta perjudicial para las plantas, deteriora lagos etc.

Esto se puede evitar empleando combustibles más limpios, gastando menos energía o instalando filtros en las salidas de humos.

Un tipo especial de contaminantes son los residuos radiactivos que se producen en las centrales nucleares. Emiten radiaciones que provocan graves enfermedades. Además, tardan miles de años en perder su toxicidad. Este tipo de residuos suponen un grave problema